Existen varios tipos de madera que funcionan muy bien, como son la de arce y la de cerezo, pero a veces podemos encontrarnos con que, al grabar, el vapor que desprende la misma queda adherido en la superficie y da un aspecto sucio al resultado.
Para ello, existen algunas soluciones o precauciones que podemos adoptar:
- Enmascarar el area a grabar: Para ello podemos utilizar cinta para enmascarar, que se comercializa en rollos de distintos tamaños y formatos. Debemos pegar la cinta sobre la pieza que vamos a grabar y, aplicando los parámetros de potencia y velocidad habituales, mandar el trabajo a la máquina láser. Una vez finalizado el trabajo de grabado y/o corte, despegamos el material sobrante.
- Utilizar jabón de manos con cítricos: En la página web de Epilog Laser encontramos un jabón de manos que elimina totalmente los restos de resina adheridos a la superficie de la madera después de realizar grabados muy profundos. Se trata de un jabón sin disolventes y biodegradable que puede aplicarse con un cepillo de dientes y limpiar después con un paño suave.
- Utilizar una lijadora: Existen una amplia gama de lijadoras eléctricas en el mercado desde precios muy asequibles. Podéis encontrarla en tiendas de bricolaje o en tiendas on-line como PIXmania.
Todas ellas funcionan bién así que lo mejor será tener en cuenta la comodidad, el precio y el tiempo que nos supone cada una de las soluciones para decidirnos por una.
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